Tal dia como hoy, 19 de octubre de 1868.

Nace la peseta en España como unidad monetaria, por decreto del Gobierno Provisional tras el derrocamiento de Isabel II.

Este cambio marcó un hito significativo en la historia económica del país y simbolizó la modernización de su sistema monetario.

Contexto del Nacimiento de la Peseta.

1. Crisis del Antiguo Régimen: El derrocamiento de Isabel II en 1868, durante la Gloriosa Revolución, generó un período de inestabilidad política y económica. El Gobierno Provisional asumió el poder y buscó implementar reformas que estabilizaran y modernizaran el país.
2. La Peseta: La peseta fue introducida como parte de un sistema monetario decimal, reemplazando a las antiguas monedas que estaban en uso, como el real. Su creación fue inspirada en el modelo de otros países europeos, con la intención de simplificar las transacciones comerciales y facilitar el comercio.
3. División y Valor: La peseta se dividía en 100 céntimos. Su valor inicial se fijó en 1 peseta = 4 reales, lo que proporcionó una transición más suave desde el antiguo sistema monetario.
4. Circulación y Aceptación: Aunque la peseta fue establecida en 1868, su circulación efectiva comenzó en los años posteriores. Con el tiempo, se convirtió en la moneda oficial de España y fue ampliamente aceptada tanto en el comercio nacional como internacional.
5. Uso y Legado: La peseta continuó siendo la moneda oficial de España durante más de un siglo, hasta que fue reemplazada por el euro en 2002. Durante su existencia, la peseta fue testigo de varios eventos históricos, incluida la Primera y Segunda Guerra Mundial, así como la Guerra Civil Española.
6. Impacto Cultural: La peseta no solo fue una unidad monetaria, sino que también se convirtió en un símbolo de la economía española y de su historia. Muchas generaciones de españoles crecieron usando pesetas, y su imagen permanece en la memoria colectiva del país.

La creación de la peseta representó un paso hacia la modernización económica de España y ayudó a sentar las bases para un sistema monetario más eficiente y coherente, que evolucionaría a lo largo de los años hasta la introducción del euro en el siglo XXI.