Como sabemos, la vida nos puede deparar sorpresas, y una de las más difíciles de afrontar es la pérdida de la capacidad para tomar decisiones.
Por eso, es importante que, en plenas facultades mentales, pensemos en cómo queremos que se gestionen nuestros asuntos en caso de que esto suceda.
Una de las medidas que podemos tomar es otorgar un poder preventivo.
Los poderes preventivos son una herramienta muy útil para las personas que quieren proteger sus intereses en caso de perder la capacidad de autogobernarse.
Un poder preventivo, podemos determinarlo como un documento legal en el que una persona; poderdante, designa a otra; apoderado, para que la represente, y pueda en su caso realizar ciertas y determinas acciones; para el caso de perdida de la capacidad para actuar por sí misma.

Es esta una figura que reconoce y determina la primacía de la libertad de decisión individual de la persona, a través de las medidas voluntarias, de la que los poderes preventivos serían una específica manifestación.
Estos poderes, ofrecen una serie de beneficios y ventajas que pueden ser muy importantes, como la garantía de que los intereses de la persona serán representados por alguien de su confianza, la evitación de la necesidad de un procedimiento judicial para la designación de un tutor o curador.
¿Cuales son o pueden ser los beneficios y ventajas de estos poderes preventivos?.
Los poderes preventivos ofrecen una serie de beneficios y ventajas que pueden ser muy útiles para las personas que quieren proteger sus intereses en caso de perder la capacidad de autogobernarse. Entre ellos, destacan los siguientes:
- Garantía de que los intereses de la persona serán representados por alguien de su confianza.
El poder preventivo permite a la persona designar a un apoderado de su confianza, que será quien la represente en caso de que pierda la capacidad de autogobernarse.
Esto garantiza que los intereses de la persona serán atendidos por alguien que conoce sus deseos y preferencias, y proceda al cumplimiento de las misma, por expreso deseo del otorgante.
Además de lo anteriormente expuesto podemos advertir otra serie de beneficios y ventajas, así;
- Tranquilidad.
El poderdante puede estar tranquilo sabiendo que, en caso de pérdida de capacidad, sus asuntos estarán en manos de persona de confianza, y en la que el otorgante tienen su total confianza.
La tranquilidad deviene de la propia acción de atender y designar en persona próxima de confianza, saber que, en el momento en que poseemos la totalidad de nuestras facultades, hemos dejado .
Además de ello, nos adelantamos a los criterios de Juez; esto es, será este el que tendrá en consideración nuestros deseos reflejados en dicho documento, y principalmente nuestro criterio a la hora de determinar una persona determina, y no otra. Es nuestro criterio el que el tribunal tendrá en consideración, a los efectos de determinación, basada en la confianza.
Determinamos un patrón de actuación en base a nuestros deseos futuros
Los poderes preventivos permiten una gestión inmediata de los asuntos del poderdante, sin necesidad de esperar a que se inicie un procedimiento judicial de complemento de facultades.
Si debemos advertir que el otorgante puede determinar al actividad o inactividad del propio poder; así que sea inactivo y únicamente se proceda a su uso para el caso que el interesado requiera o precise de ciertos apoyos, o conste vulnerada sus capacidad por diversas afecciones, dolencia o enfermedad.
¿Qué podemos disponer en los poderes preventivos?
En los poderes preventivos, la persona con capacidad puede disponer de una amplia gama de facultades para su apoderado.
El contenido del poder puede ser muy variado, teniendo en consideración que el otorgante lo realiza en función o base a su voluntad, y según su criterio de futuros deseos o necesidades, determinado así las funciones de apoderado, entre ellas, vender, comprar, administrar, aceptar una herencia, constituir una sociedad mercantil, avalar un préstamo, etc.
Entre estas facultades, destacan las siguientes:
- Representar a la persona en todos los ámbitos de su vida, incluyendo la persona, los bienes y los negocios.
- Gestión patrimonial y Administración los bienes de la persona.
- Realizar actos de disposición de los bienes de la persona, como venderlos, donarlos o hipotecarlos.
- Tomar decisiones sobre la salud de la persona. El apoderado puede tomar decisiones médicas en nombre del poderdante, como el consentimiento para intervenciones quirúrgicas, tratamientos o la retirada de la alimentación , etc…
Los poderes preventivos son una medida importante para garantizar que tus asuntos estén en buenas manos en caso de pérdida de capacidad. No lo dejes para mañana, y consulta con un abogado especialista para que te asesore.
